Conrado

Allá
por la chacra de mis abuelos
donde las cuculíes llevan pantimedias más bermejas que una tuna
a menudo sobrevuelan los gavilanes
en busca de alguna gallina errante o un conejo despistado
con los cuales llenarle el buche a sus pichones
Situaciones así enfrentaba
a causa de estas diestras rapaces
día a día
mi pobre tía Rosenda
Ahorabien
no sé si ustedes saben
-o es una de las muchas cosas que por allá se inventan-
que cuando hay peligro de tal cacería
a los animales se les avisa con un:
"Walu-walu"
para que salgan esfumados
a sus madrigueras
Se vivía, pues, en continuo griterío
paratalefecto sabiamente mi tía
había adiestrado al bueno del Conrado
su loro cetrino
para que cumpla tan agitador papel
entre el menudo rebaño
Cómo no les digo que además
con los años y el mal uso de la libertad
Conrado adquirió unas feas manías
por ocio y soledad;
le gustaba oir las discusiones familiares de los vecinos
así como mirar telenovelas de 6 a 9 pe eme
horas en que no ejercía su oficio
Por ello aprendió a reprochar feamente
hasta el mínimo detalle a mi tía Rosenda
mas cuando era censurado por tales afrentas
tomaba extrañas posturas de agobio y ofensa
-influencia sin duda de la tele y la holganza-
por eso aquel día
que un gavilán se lo cargó
-porque en lugar de ejercer su ocupación
el condenado se encontraba confabulando libremente
con otras avechuchas en el maizal-
ni mis abuelos, los vecinos o mi tía
-que pese a todo heroicamente lo quería-
pudo tomar en serio sus lejanos gritos de auxilio
implorando que le peguen un certero tiro
a su garrudo homicida

Encuentros

Nu-la
la apreciación es nula
derogado el propósito también
nulos el pánico, la ventura,
el vacío, la emergencia, mis ganas
y volver
Nulos antaño, hogaño
séver le y
.

mas si virreyna-nulidad va decidiendo

desvestirse

revertirse

revestirse

desvertirse

muy cerca

bocanada-nostalgia circunda

desabrochándose el jersey

también

Franklin

Existieron muchas hipótesis
sobre la cimarronería de Franklin
lo único que todos tenían por cierto
es que era un burro liberto
Podíamos encontrarlo
matando el tiempo
empujando pequeñas rocas por las laderas
topeteando con algún becerro o
ramoneando las pencas verdecitas
porque así de cruento
era él
Muy poquito le agradaban las personas:
desde cualquier lejanía
entre el matojo
se podía sentir su mirada siniestra
sus ojos ultradelineados
cual orca asesina
Era tan perverso muchas veces
que destruía plantaciones enteritas de chala
se almorzaba por gula los choclos verdes
aunque luego lo encontraran en alguna quebrada
a punto de finiquitar su silvestría
henchido de placer y gases
Pero no siempre fue
el diablo con cachos, no
Historias hubo y muchas
acerca de su tremenda benevolencia:
Una madrugada apareció
rebuznando a todo pulmón
por en medio de la carretera
todos lo maldijeron hasta que vieron
lo que a su lado traía:
un corderito perdido hace dos días
Franklin tal vez no era el dulce Platero
pero sí tan humanamente arrebatado
como ustedes
o como yo
Por eso, carajo, no entiendo
quién pudo asesinarlo así esta madrugada
como si se tratara de un traficante de armas
un capo de la droga
o un indómito rufián

Novio

A veces
llama desde un cachito del mundo llamado Florida
para contarme que se desglosa temprano de la cama
y que en lugar de oraciones
recita algún poema de Eielson por las mañanas
Cruza 7 calles como atleta, pero llega a pasitos de ardilla al hospital
-es vital llegar antes que los males se despierten-
entonces comienza el juego de los acertijos corporales
de transmutarse un rato en la piel de los indispuestos
de repartir coloridos brebajes a sorbitos
de racionar con todos su sonrisa de choclo por cada piso del edificio
Y por si fuera poco
sabe que a las 3 Abuela está sola en casa viendo la novela
y la llama
y la abraza implícitamente
le habla fuerte
le promete
y la llena de besos
tácitamente







Anuncio de vicio público:
Juraría que había puesto otra entrada por acá.
Oremos: Blogspot, aunque sean feos,
no borres mis posteos

Mararía

Era
como Petra Cotes
¿recuerdan?
tenía vocación para el amor
Yo
me sentaba a su lado
viéndola construir el tiempo
en chalinas de punto ladrillo
y poniendo
caramelos pelados en mi boca
como a su pichón
De esta vida Mararía no sabía
ni leer ni escribir
pero armar bochinches
y contar dinero, eso sí
Cuando cumplí 9 años
ella
mi madre de utilería
se desplazó lejos
creo que a ordeñar vacas
a una chacra
Ahora
que sé exactamente dónde
tengo una nota
y un plan
para hacerla regresar
La nota tal vez
no sirva de mucho
El plan está mejor:
una foto mía
del desastre que soy

Entremés

La escena sólo te permite ver

de sus rodillas hacia abajo

unos pies vertiginosos

bajo una falda con flecos

y pequeños dedos de puntas rosadas

con diminutas uñas de nácar

incrustadas en ellos

El arco que les sigue

relaja la pendiente

perdiéndose suavemente contra el suelo

Al final del show

ella muestra las plantas

El telón cae
Tú aplaudes

Todas las noches
me proponen engendrarte
sábanas negras
amasijo de estrellas
Las noches son estancias
obscenas

Todo lo que me gusta
son las flores que se abren
panza arriba
bajo el sol
El sol también me gusta
por ser margarita en barítono
Melodías florales del estío
Ya no te odio, verano

Cariño

Mi abuelo un día
olvidó su gallo en un taxi
Una semana enterita
estuvo parado en el terrapuerto a la 1
pero como ya todos prevemos
el taxista nunca más apareció
Entonces
ideó un método mejor

para encontrar al secuestrador
Los miércoles
se mandaba el día entero
viajando en taxis de todos los colores
porque suponía que el malhechor
sabiéndose buscado
había variado el color de su automóvil
Lo buscó como a un hijo
pero mi abuelo
no volvió a ver al Cariño
-que así se llamaba el gallo-
Y

fue así como

se hizo de una legión de taxistas amigos
miamigoeltaxistaNacho
miamigoeltaxistaPablo
miamigoeltaxistaFino
quienes para su cumpleaños
llegaron
con pollos a la brasa bajo el brazo
A lo mejor
-o a lo peor-
alguno de esos
fue Cariño